El Acuerdo de París sobre el cambio climático establece el objetivo de limitar el aumento de la temperatura global a entre 1.5°C y 2°C durante este siglo, lo que exige que la economía global alcance la neutralidad de carbono entre 2050 y 2070.

En este contexto y a través del proceso de revisión de la Contribución Nacionalmente Determinada (NDC) en 2025, México tiene la oportunidad de definir una estrategia de descarbonización profunda para acelerar el cumplimiento de sus metas de reducción de las emisiones de Gases y Compuestos de Efecto invernadero (GyCEI). Las medidas para promover la economía circular y eficiencia energética tienen un gran potencial de abatimiento de emisiones de GEI y carbono negro en todos los sectores de la economía; permiten generar beneficios ambientales vinculados con la reducción en la extracción de materiales, la generación y consumo de energía y de residuos y la emisión de contaminantes; y promueven la competitividad de la economía.

El modelo económico lineal actual, de extraer, usar y desechar, no es sostenible; los principios de economía circular buscan crear un modelo restaurativo y regenerativo en el que se minimicen los impactos ambientales de los materiales a través de su reaprovechamiento e integración en la cadena de valor y ciclo de vida. En 2024, la SEMARNAT presentó las bases para la elaboración de un diagnóstico de la estrategia nacional de economía circular (SEMARNAT, 2024a), en las cuales se presentan los principales desafíos y áreas de oportunidad estratégicas para una transición hacia la economía circular donde se promueva la competitividad de las industrias y sectores asociados con esta economía. Estas son bases importantes para la futura elaboración de una estrategia nacional de economía circular en México alineada con los compromisos climáticos del país donde se promuevan y escalen acciones que las industrias y gobiernos ya están realizando, incluyendo el a co-procesamiento de residuos en hornos cementeros, los bancos de alimentos, los procesos de biodigestión de residuos, el compostaje y reciclaje de papel para la industria, entre otros.

En términos de eficiencia energética (EE), a través de la Comisión Nacional Para el Uso Eficiente de la Energía (CONUEE), México ha avanzado en la introducción de tecnologías más eficientes y el establecimiento de medidas regulatorias a través de normas oficiales mexicanas, etiquetado y estándares voluntarios en electrodomésticos, vehículos, industria, edificaciones, alumbrado público, entre otros bienes y sectores. Se calcula que el potencial de mitigación de emisiones GEI de medidas eficiencia energética es de 30.45 MtCO2e a 2030 (SEMARNAT 2024b) adicionales a las que México estimada en la NDC de 2015, a través la cogeneración en los sectores industrial, de servicios y comercios así como del establecimiento de normas para reducir el consumo energético.

Periodo de la consultoría: enero – octubre 2025